¿Qué es el trastorno bipolar?
Una alteración mental que afecta tanto a la energía como al estado de ánimo de una persona, causando así variaciones extremas en su comportamiento.
Las personas con trastorno bipolar experimentan fases de manía o hipomanía (fase elevada) y depresión (fase baja).
¿Cuáles son sus síntomas?
Varían dependiendo de la fase en la que se encuentra el individuo, ya sea en la fase baja (depresión) o fase elevada (manía o hipomanía).
Fase baja o depresiva
- Fatiga y falta de energía
- Pensamientos negativos e ideas de suicidio y muerte
- Sentimiento de tristeza y vacío
- Pérdida de interés en actividades del día a día y cotidianas. Apatía.
- Alteraciones en el sueño y apetito
- Ansiedad
- Melancolía
- Aumento del cansancio y cambios físicos
Fase maníaca o hipomaníaca (fase elevada)
- Sentimiento de euforia y excitación
- Falta de juicio y toma de decisiones no meditadas
- Aumento de la energía y la actividad
- Alteración en el sueño. Insomnio.
- Fácil distracción
- Comportamientos agresivos
- Pensamiento acelerados
- Aumento de la libido
¿Cómo se diagnostica?
Un profesional de la salud mental, como un psicólogo o psiquiatra, llevan a cabo una exhaustiva valoración para determinar si el paciente cumple con los criterios diagnósticos del trastorno bipolar.
La valoración se basa en:
Una revisión del historial médico
Revisión de los familiares y genética del paciente
Evaluación del estado de ánimo del paciente durante un periodo de tiempo largo y determinado
Medición de los patrones del sueño y actividad del paciente
Exámenes clínicos y de laboratorio. De esta forma se descartan otro tipo de alteraciones médicas
Es muy importante que el paciente proporcione toda la información completa y precisa de su historial médico durante el proceso de evaluación, para que el diagnóstico sea preciso y eficaz.
¿Cuál es su tratamiento?
El trastorno bipolar es una enfermedad crónica que necesita un tratamiento continuo y constante.
El tratamiento adecuado ayuda a las personas a manejar los síntomas y situaciones cotidianas no comunes. Tiene su foco en reducir significativamente la gravedad y la frecuencia de los episodios depresivos y maníacos con el fin de que las personas lleven una vida funcional normal.
Las terapias con profesionales que tratan el trastorno de la bipolaridad son esenciales, además de complementarlo con los medicamentos.
El tratamiento es individual y personalizado. Todo tratamiento requiere un seguimiento regular con un profesional de la salud mental que se vaya ajustando según la sintomatología.
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